lunes, 13 de noviembre de 2017

PARODIAS DE HOMBRES-TIPO




          PARODIAS DE HOMBRES-TIPO

   
      

 EL POLÍTICO 10, POR LOTARIO, EL MAS DICHARACHERO DEL DIARIO

 Serie de artÍculos publicados en el diario "La paja ajena y la viga propia" bajo el título de Parodias de gente conocida.

Esta serie de artículos, que en un principio pasaron desapercibidos, serían causa de la expulsión fulminante del prestigioso diario antes mencionado. Sucedió lo inevitable, alguien de la redacción acabó por leerlos y contárselo al jefe. El tarro de las esencias fue destapado por un lector, que en la sección de cartas al director, se quejó amargamente de que un primo suyo, famoso a raíz de participar en el concurso de Gran hermano, hubiese sido parodiado con saña por Lotario.

Fue entonces cuando se corrió la voz por todo el periódico y quienes -todos- nunca habían leído un solo artículo de Lotario (era considerado un zopenco, un burro, con menos porvenir que una hormiga en la senda de los elefantes) se apresuraron a sacar de la hemeroteca todos los números atrasados. Leyeron a la hormiguita sin futuro como si se tratara de la Sibila de Patmos, por poner un ejemplo al azar.

¡Hay la que se armó! Para su sorpresa descubrieron que Lotario se había metido, con sangrante saña, hasta con el Lucero del Alba (¡qué culpa tendría el pobre!). La suerte y el hecho de que solo dos enteradillos, siempre los hay, leyeran habitualmente los artículos de Lotario, les libró de sufrir querellazos, un día sí y otro también.

Al pelota, Sr. Roca, le faltó tiempo para ir con el cuento al director y con unas cuantas fotocopias en su mano derecha (¡será pelota, sabiendo que el Sr. Bond,James, el director, es más de derechas que su homónimo!). Ambos se mesaron el bigote, retorciéndoselo hasta convertirlo en un filo hilillo y luego se lo comieron a palo seco.

Lotario terminó en la calle (en una boca de metro por más señas, que tiene alquilada a un vagabundo a cambio de una botella de vino de vez en cuando, por si vienen las vacas flacas, que siempre vienen). Al cabo de los 365 días que tiene el año, recibe, más o menos, unas 60 patadas en el trasero, con su correspondiente paro incorporado.

Ahora Lotario está en la radio y un servidor, el narrador, el anónimo avispadillo del diario, les va a contar a ustedes esta serie de artículos de Lotario a cambio de cien eurillos de nada, a pagar a plazos si lo desean, en mi cuenta 0000...0 y 1 del Banco "Hágalo todo por teléfono" (HTT).

Claro que he censurado nombres propios, nombres comunes, adjetivos calificativos, adverbios y hasta algún verbo peligroso. No sé lo que les va a quedar, pero seguro que es algo muy interesante. Y ahora, ahí va la primera en la frente.




PSICO-BIO-TIPO DEL POLÍTICO 10

Un político 10 nace. Si no naces no intentes rehacerte en una probeta, manipulando el cóctel de tus genes del montón, porque no conseguirás nada. Todo es inútil, tío, o naces 10 o a fregar escaleras como el común de los mortales.

El bebé aspirante a político 10 es el doble de alto que el resto de los bebés nacidos en ese año. No se puede alargar más el tiempo para la estadística puesto que cada día los bebés nacen más altos y más guapos. Es ley de vida. Su cuna, la del político 10, es más alta y grande que la del resto de los bebés de su generación. En otros tiempos a estos bebés les llamaban de alta cuna. Hoy está muy mal visto, porque suena a rico, aristocrático, suertudo.

Su guapura arroba al observador de cunas quien comenta: "éste llegará lejos". El encanto de estos bebés de futuro asegurado les permite proezas tales como lograr que su canguro le cambie el pañal sin verse obligado a llorar como una locomotora dolorida. Y además de cambiarle el pañal, la canguro le da un masajito gratis. ¡Esto es encanto y lo demás vainas!

Pero busquemos el perfil, como se dice ahora, del político 10 o como digo yo, Lotario, el ario, el psico-bio-tipo. Desde luego un político  10 no es bajito y malhumorado. ¿Conocen ustedes alguno con esas características?. Les reto a ello y les apuesto un par de jarras en la fiesta de la cerveza de Dusseldorf o de donde sea, que no me acuerdo.

El bigote no es precisamente un adminículo para llegar lejos. Datos históricos de toda solvencia, ratificados y visionados con lupa, nos permiten afirmar que "político con bigote, o feo o dictadorzote". No digamos la cabeza como bola de billar. Ahora mismo me estoy acordando de un tal Musolini y que me perdonen los calvorotas, nadadores de élite y guaperas a la moda.

La barba, en cambio, puede ser resultona y canosa. Aunque transforma al político en un patriarca, en un sabio, en un ancestro digno de toda confianza. Claro que en política la sabiduría ancestral genera más desconfianza que otra cosa. hace que el elector piense en un filósofo o catedrático de universidad, o uno de esos que todo lo lían en cuanto abren la boca. Un político 10 debe conocer lo suficiente para subirnos los sueldos y bajarnos los impuestos. Lo demás es liar la madeja y a ver por dónde salimos. ¿Cuántos políticos 10 barbados pueden señalarme con el dedo, aquí ahora? Por cada uno de ellos un pincho moruno en la fiesta de la cerveza de Frankfurt o de Dusseldorf como dije antes. Es lo mismo. ¡Y a haber si invitan ustedes a una cañita, so agarraos!

Miren. Un político alto, guapo y con cara de niño y ojos azueles, sin barba ni bigote, sin peluquín, puede que no llegue a 10 pero es resultón y siempre tiene el voto femenino de su parte. Y eso por lo que se refiere al biotipo. En cuanto al psicotipo, necesita encanto, mucho encanto, mucha mano izquierda y un montón de talante, como dicen ahora, o de buen rollito, como seguimos diciendo los de antes.

Si un político no puede convencer a la madre que lo parió, que le conoce muy bien, de que la bolsa de la compra está bajando, aunque ella la haya subido al quinto sin ascensor, con grandísimo esfuerzo, y de que la cartera está engrosando, a pesar de poder juntarse ambas paredes de cuero con la uña, entonces nunca será un político 10, pueden creerme.

El encanto y la labia son al menos un 90% del político 10. No hagan como los asesores de imagen. Estos, mucho preocuparse del rizo rebelde o del mejor perfil televisivo, pero lo que cuenta es la labia. Hablar de todo sin decir nada y con sonrisa de oreja a oreja es casi mejor que ser alto y guapo, casi, casi, le falta un pelín.

Un político 10 debe vestir comme il faut. Un traje para cada momento y siempre con corbata. A no ser que se pertenezca a un partido de izquierdas y se esté dando un mitin a proletarios en mono de trabajo. Entonces la corbata será como la soga al cuello del ahorcado.

Y...y.-..y... y ya está bien de exprimirme las neuronas por diez eurillos diarios que me paga el James Bond. Ni siquiera tengo un lector que se moleste en escribirle una carta al director comentándole alguno de mis artículos.

Miren, vamos a hacer lo siguiente. Si alguien me está leyendo y quiere participar en un concurso, que envie su candidato a político 10 y las razones de esta designación. Luego un jurado, imparcial, decidirá y el ganador recibirá un cheque por mil euros y unas vacaciones gratis en el yate del patrón, James Bond. Espero que colaboren.

NOTA DEL VERSIONADOR O CENSOR: Este artículo se escribió hace un año. Ahora Lotario está en la radio y el Sr. Roca el pelota es el censor oficial del diario. No pasa ni una. Y demos gracias a dios que a Lotario no le leía nadie. ¿Se imaginan ustedes al patrón cediendo su yate para las vacaciones del ganador del concurso?.-

Claro que pensandolo mejor podríamos buscarnos un sponsor y seguir con la idea de Lotario. Miren, hoy mismo me pongo en contacto con Electricao y les propongo el trato. Como ustedes saben, Electricao es la empresa esa del anuncio que dice: ""Electricao, un buen tazón y todo el día eléctrico; eso sí, no se olviden de desenchufarse antes de dormir".

Y con esto y un bizcocho hasta mañana a las ocho.